lunes, 25 de abril de 2016

Armas contra los prejuicios.

Hace poco encontré un video en Facebook en el que un padre agarraba a su hijo, un chico joven con cresta, a la fuerza y le cortaba el pelo por no estar de acuerdo con su apariencia.
En los comentarios de dicho video, destacaban una persona en particular, que defendía este acto alegando que se lo merecía, cito textualmente: "Con dos cojones sí señor. Tanta tontería"  
Mientras otras personas se enfrentaban a él explicando que no debes juzgar por la apariencia él les respondía con cosas como  "En mi casa las normas las dictó yo"



Aquí una muestra de esta conversación.

Es conocido que aun tenemos que lidiar con diferentes estereotipos, con juzgar solo por la apariencia, y solo por eso, podemos perder la oportunidad de conocer a gente interesante, con potencial que vale su peso en oro, o simplemente nos olvidamos que somos personas, y pasamos a ser un tatuaje, o un peinado, o una prenda de vestir. 
Al ver esta conversación recordé un magnifico video que vi hace mucho tiempo y que ilustra esto a la perfección.




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